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Un fuerte
implante del eje Argentina-Venezuela permitirá con la instalación de varios
cientos de expendedoras de combustibles, romper los monopolios privados de la
Esso, YPF-Repsol, Shell y otros.
Los
presidentes Néstor Kirchner de Argentina y Hugo Chávez de Venezuela ratifican
la integración sudamericana y fortalecen la independencia de sus países
mediante el acuerdo, que instalará en territorio argentino varios centenares
de expendedoras de combustible, que ofrecerán a los usuarios los mismos a
menor precio que los monopolios privados anglo-norteamericanos y españoles.
Si esto se
extiende a Brasil y PDVSA (Petróleos de Venezuela S.A.) acuerda con la
Argentina, con sus técnicos y elementos tecnológicos que Argentina carece al
haberse enajenado YPF (Yacimientos Petrolíferos Fiscales), entraría también en
el acuerdo Petrobras ayudando a los países latinoamericanos al desarrollo
industrial, el fortalecimiento de la pequeña y mediana empresa y de la
industria de base, tanto liviana como pesada.
Un fuerte
golpe a los grupos mafiosos de la Esso, YPF-Repsol, Shell, Bancaloeb, entre
otros. Por mucho menos John Foster Dulles organizó un golpe de Estado en Irán,
que derrocó al gobierno de Mohamed Mossadegh y por lo cual el político iraní
fue asesinado implantándose la dinastía del Sha de Persia, Rezha Pavlevi que
duró varios años depredando a Irán hasta la revolución de los ayatollah.
De
confirmarse el acuerdo, resistir toda clase de presiones y consolidarse el
proyecto en la realidad, la nafta y otros insumos derivados de crudo bajarán
de precio y la Argentina no estará sometida a los depredadores imperialistas,
sean estos anglonorteamericanos o del subimperio decadente de los intereses
españoles ligados a la burguesía neofranquista y opusdeista. |
