NOTICIAS DE ARGENTINA
Un país en (pocas)
manos extranjeras
Marina
Marsili
La Insignia. Argentina, diciembre del
2002.
El 65 por ciento de los capitales de las 500 principales empresas instaladas en
Argentina corresponde a inversores extranjeros, según surge de la encuesta
oficial realizada por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censo (Indec).
Además, este grupo concentra el 70 por ciento de las ventas externas del país.
La política impulsada en la década de los noventa de extranjerización de la
economía llevó a que la participación de los capitales externos en las
megaempresas pasara del 45 por ciento en el 93, al 65 por ciento de las mismas
en diciembre 2001. Situación que -bajo el escenario legal actual- implica que
las dos terceras partes de las ganancias de estas empresas pueden salir del país
sin más trámite que una transferencia.
Otro dato importante que surge del estudio de Indec está vinculado a las
exportaciones; del conjunto de ventas al exterior que realiza el país, el 66 por
ciento corresponde a cien de las empresas mencionadas. Es decir, cien empresas
-con importante presencia de accionistas extranjeros- tienen las dos terceras
partes del comercio exterior argentino.
Los datos oficiales permiten explicar por ejemplo por qué desde junio de 2001 a
junio de 2002 -en plena crisis financiera- el sector privado no financiero
acumuló egresos del país por 22.397 millones de dólares, mientras sólo quedaban
líquidos para la economía interna en materia de comercio exterior 3.820 millones
de dólares.
Mención aparte merecen las empresas de servicios públicos privatizadas que hoy
pelean por adecuar las tarifas con aumentos de hasta 70 por ciento.
Según la encuesta que
realizó el Indec, las empresas privatizadas sólo aportan el 38 por ciento del
valor agregado que generan estas 500 megaempresas, pero obtienen el 57 por
ciento de las ganancias del grupo.
La encuesta
oficial no hizo más que ilustrar como la llegada de capitales extranjeros
obedece al afán empresario de producir más barato y competir en el mercado
externo o destinarse a obtener ganancias descomunales en negocios locales
demasiado rentables.
|